Resumen
de la memoria de la excavación:
En la excavación
de una de las casas de esta época, escondido bajo un gran sillar
existente en una de las esquinas interiores, descubrimos un tesorillo
con claros indicios de que fue ocultado deliberadamente. Por tanto,
este hallazgo constituye una base bastante segura para fechar el fin
de este período. Sus piezas, todas de oro, consisten en dos
pares de pendientes, seis anillos, de una labor de orfebre extraordinaria,
un lingote, dos sólidos áureos de Honorio, un semis
áureo de Arcadio y varias ágatas con entalle. La presencia
del lingote y el hecho de que las joyas no se hallen terminadas por
completo, pues los cabujones de los pendientes y de casi todos los
anillos están a falta de colocar las piedras y cerrarlos, nos
hace suponer que pertenecían a un taller de joyería
y que su creador estaba confeccionándolas en el momento en
que hubo de ocultarlas.
Además,
por el conjunto de las monedas de este tesorillo, cuya clara cronología
nos ofrece la data 408 a 410 d.J.C., podemos deducir que la última
fase de habitabilidad de estas viviendas corresponde a principios
del siglo v, y ello aclara y explica que esta suma de alhajas fueran ocultadas debajo de aquella piedra con motivo
de la invasión de los bárbaros.